jueves, 15 de marzo de 2012

Atmósfera protectora

Nunca sabemos cómo actuar. Tenemos miedo a actuar, a pensar, a expresar de verdad quiénes y cómo somos, por miedo a represalias, a la opinión del resto, a quedarse excluido. Tenemos miedo a hacer lo que de verdad queremos hacer. Tenemos miedo a ser nosotros mismos.
En la adolescencia, cuando tu mundo se reduce a un grupo de personas, tienes que mirar con lupa qué dices, qué piensas y qué haces. Pasarlo mal o bien a veces puede depender de una acción o de una palabra, y a veces un error cuesta poco cometerlo pero mucho arreglarlo. Ese miedo que tenemos, que nos hace dudar incluso de nosotros mismos, nos hace aislarnos para evitar mayores daños, para evitar mayor exclusión, y entonces creamos como una especie de atmósfera protectora para aislarnos que se reduce a tres preceptos: ver, oír y callar. Te sientes alejado del resto, que los demás ríen y lo pasan bien, pero te callas para no decir algo a destiempo que te ridiculice. Y entonces llegas a tal punto que no te sientes bien ni contigo mismo, te desprecias por ser tan idiota por no saber qué cojones hacer o decir. Y cada día que pasa, lo llevas peor.
Esa atmósfera nos hace ser simples autómatas que ven, oyen y sienten, pero que ni actúan ni hablan. Y lo más curisoso de todo es que a veces hay que usarla con las personas que menos te lo esperabas.

Canción XXXII: Joy Division: Atmosphere

1 comentario:

  1. me gusta me gusta mucho la forma en que te expresas..... cosas parecidas en pensado pero creo que un pco mas torcidas pro decirlo de alguna forma, pronto compartire algo contigo.... saludos!

    ResponderEliminar

Merci beaucoup!